
Antes de la recuperación de Cornelia Ras, el estadounidense Bill Lapschies, de 104 años, era el paciente dado de alta más longevo
Una holandesa se ha viralizado como la mujer más longeva que se cura de COVID-19.
Un día después de cumplir 107 años, Cornelia Ras se enfermó de nuevo coronavirus tras asistir, como cada semana, a la iglesia junto con compañeros del asilo en el que habita en la isla de Goeree-Overflakkee.
Al menos 41 adultos mayores se enfermaron y 12 murieron, algunos amigos de Ras.
La sobrina de ‘Tía Cor‘, Maaike de Groot, celebró ante medios locales la recuperación de su tía el 6 de abril, pero declaró que “honestamente no pensamos que lo lograría”.
Relató que tiene constante contacto telefónico con ella y que le gusta mucho escuchar audiolibros y pasar el tiempo en un balcón del asilo.
Para constatar que se trata de la mujer más longeva que se recupera del COVID-19, el medio NU consultó a la Organización Mundial de la Salud.
Un representante de la OMS declaró que no tienen la edad exacta de todas las personas que se han curado del nuevo coronavirus, pero que “es muy probable” que Cornelia Ras sea la paciente dada de alta más longeva.
Antes de conocerse la recuperación de Ras, el estadounidense Bill Lapschies, de 104 años, era el paciente dado de alta más longevo.
En Holanda, existen otros pacientes recuperados de más de 100 años: Capelle aan den IJssel de 101 y Steenbergen de 103 años.
Con información de NU y Rijnmond