El Proyecto ambiental Libera propuso el término para poner nombre al problema ambiental del abandono de residuos en la naturaleza
Con motivo del Día Mundial de la Vida Silvestre, el cual fue celebrado el pasado 3 de marzo, organizaciones ecologistas acuñaron el término “Basuraleza”, la cual puede deinifirse como los residuos generados por el ser humano y abandonados en la naturalza.
Hasta ahora, las organizaciones ecologistas habían utilizado el término inglés ‘littering’ para alertar sobre los posibles impactos en el medioambiente del abandono de basura en la naturaleza, sin embargo, dicha palabra no tiene una traducción al idioma español.
El proyecto Libera es una inicitiva de SEO/BirdLife y Ecoembes para liberar a la naturaleza de basura- y propuso una palabra alternativa que, al menos en español, ayude a concienciar y prevenir el ‘littering’: basuraleza.
Os presentamos #BASURALEZA nuestra nueva campaña junto a @SEO_Birdlife para acabar con el abandono de residuos en nuestro entorno #ProyectoLibera https://t.co/MUEpR5nQpl pic.twitter.com/wUEFLnTkxV
— Ecoembes Comunica (@ecoembes_com) 2 de marzo de 2018
“La ‘basuraleza’ está lejos de ser un problema meramente estético o secundario. Aunque queda mucho camino por recorrer en el ámbito científico, la evidencia es incontestable: estamos ante una catástrofe ambiental que requiere de acción de todas y todos”, detalló Federico García, responsable del área Social de SEO/BirdLife.
El impacto de la basuraleza sobre la vida silvestre es, quizá, uno de los campos mejor analizados hasta la fecha, especialmente en el medio marino. Y las cifras no paran de crecer: en 1997, una exhaustiva revisión contabilizaba 247 especies afectadas. Nueve años después, en 2016, un nuevo informe triplicaba el dato hasta las 800 especies, aunque para entonces ya se empezaban a conocer estimas por encima de las 1.400 especies marinas y acuáticas asociadas con la basuraleza.
La incidencia es especialmente grave en el caso de fauna y flora amenazada. Por el momento, se estima que un 17% de las especies afectadas por la basuraleza forma parte de la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). Es el caso, por ejemplo, de la tortuga boba o del oso marino ártico, ambas catalogadas en situación vulnerable. Las aves marinas, como la pardela cenicienta o la pardela balear, tampoco se escapan a la catástrofe ambiental que supone la naturaleza. Un reciente estudio calcula que el 90% de las aves marinas han ingerido plástico y que, de seguir así, el número llegará al 99% en 2050.
“Estamos todavía a tiempo, hay solución. Así, desde LIBERA hemos querido, a través de una palabra que no está en el diccionario, seguir trabajando a través de nuestros pilares, ya que la solución a este problema no solo es necesaria, sino también factible”, afirmó Nieves Rey, directora de Comunicación y Marketing de Ecoembes.