El atacante de Dayton, Ohio, aprovechó diversos vacíos legales para convertir una “pistola” en un rifle de cañón corto
Connor Betts, el atacante de la ciudad de Dayton, se habría aprovechado de varios vacíos legales para poder realizar la masacre del domingo, donde asesinó a nueve personas y lesionó a 14.
De acuerdo con la información disponible hasta el momento, el arma utilizada en los hechos se trata de una catalogada como “pistola” calibre .223, la cual se asemeja más a un rifle estilo AR-15 con un cañón corto y culata.
El arma fue comprada legalmente en Texas de un vendedor en línea, el cual a su vez entregó el arma a un comerciante local, quien realizó el análisis de antecedentes exigido por la ley, sin encontrar nada en el expediente criminal de Betts que le impidiera poseerla.
El agresor también adquirió de manera legal los cargadores de hasta 100 balas de capacidad, así como el receptor inferior (lower receiver), que aloja el gatillo y el cargador, para lo cual se requiere una nueva revisión de antecedentes. El resto de las partes de las armas pueden comprarse legalmente en tiendas físicas o en líneas.
Las investigaciones también señalan que Betts había adquirido hasta 250 municiones, de las cuales ocupó al menos 41.
Richard Biehl, jefe de la Policía de Dayton, aseguró el martes que el arma fue “modificada en esencia para funcionar como un rifle y evadir cualquier prohibición legal“.
Actualmente, Estados Unidos tiene en vigor varias restricciones sobre rifles con cañones cortos con el objetivo de evitar que la gente cree sus propios rifles y los mantenga ocultos. El límite impuesto al largo del cañón está actualmente en 16 pulgadas (40.6 centímetros).
Las armas estilo AR-15 se clasifican como “pistolas” cuando tienen un cañón corto y no tienen culata, o rifles cuando cuentan con culata y un cañón de al menos 60 centímetros; cabe destacar que para obtener un arma catalogada como un rifle se necesitan pagar impuestos y pasar por un trámite especial. El arma creada por Brett no entra en ninguna de estas categorías.
El problema con estas categorías se complica aún más con las abrazaderas de pistola (pistol brace). Comercializadas desde 2010, las abrazaderas permiten sujetar el arma al brazo, facilitando disparar una pistola con una sola mano.
Sin embargo, varias de ellas fueron diseñadas para funcionar como una culata al hombro (sin que sean catalogadas como “culatas”, lo que vuelve difusa la línea en que una pistola estilo AR-15 se convierte en un “rifle” y viola la ley.
Las autoridades tampoco ayudan a dilucidar el problema. En una carta a fabricantes en 2012, la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF) señaló que utilizar una pistola con una “pistol brace” no la convertía en un rifle.
Sin embargo, en 2015 otra carta indicaba que dicha modalidad de disparo constituía un rediseño del arma, por lo que necesitaba un permiso adicional así como pagar un impuesto extra.
Para 2017, la ATF modificó nuevamente su postura, señalando que el “uso esporádico” de una abrazadera al hombro no constituía un rediseño, pero modificar activamente el dispositivo diseñado para el hombro sí lo hacía.
Con información de USA Today
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