
Tras superar el récord de imbatibilidad de la Serie A italiana, el portero publicó una emotiva carta en Twitter
Gianluigi Buffon, portero de la Juventus con una carrera de 21 años como futbolista profesional, batió el domingo pasado el récord de imbatibilidad en la Serie A al acumular 974 minutos sin encajar goles. La racha acabó en el partido ante el Torino cuando finalmente cayó vencido por el cobro de un penal de Andrea Belotti (48′).
Buffon rompió el récord de 22 años de antigüedad al cuarto minuto del partido que Juventus le ganó 4-1 a Torino.
“Le debo casi todo el crédito a mis compañeros que están al frente, desde los delanteros que se dejan la piel, hasta nuestra defensa que está conformada por algunos de los mejores zagueros del mundo”, dijo el portero que publicó en su cuenta de Twitter una emotiva carta sobre su relación con la portería.
Avevo 12 anni quando ho voltato le spalle alla porta. E continuerò a farlo… #G1G1 pic.twitter.com/nJfM58Rv79
— Gianluigi Buffon (@gianluigibuffon) 21 de marzo de 2016
“Tenía 12 años cuando te di la espalda. Renegué de mi pasado para asegurar tu futuro.
Fue una elección del corazón.
Una elección del instinto.
Justo el día en que dejé de mirarte a la cara, sin embargo, empecé a amarte.
A protegerte.
A ser tu primer y último instrumento de defensa.
Me prometí que haría todo lo posible para no cruzarme con tu mirada. O para hacerlo lo menos posible. Pero cada ocasión fue un sufrimiento, tener que darme vuelta para entender que te había desilusionado.
Una vez.
Una vez más.
Siempre hemos sido opuestos y complementarios, como la Luna y el Sol. Forzados a vivir uno al lado del otro, pero sin poder tocarnos. Compañeros de vida a quienes se niega el contacto.
Hace más de 25 años hice mis votos: juré protegerte y vigilarte. Convertirme en un escudo contra tus enemigos. Siempre he pensado en tu bien, anteponiéndolo al mío. Y todas las veces que me di la vuelta para mirarte intenté sostener tu expresión decepcionada con la cabeza en alto, pero a sabiendas de mi sentimiento de culpa.
Tenía 12 años cuando le di la espalda a la portería.
Y seguiré haciéndolo. Mientras las piernas, la cabeza y el corazón resistan.”
Redacción