Jorge Cantú se proclamó ganador del evento al vencer a Frank Díaz en el Zócalo, que se disfrazó de diamante de béisbol
Con un gran ambiente dentro y fuera del campo de béisbol montado en la plancha del Zócalo de la Ciudad de México, este domingo se vivió el Home Run Derby, realizado para festejar los 90 años de la Liga Mexicana de Béisbol (LMB).
Los aficionados del “rey de los deportes” abarrotaron las gradas, así como los jardines derecho, izquierdo y central, para poder presenciar este evento histórico para el deporte nacional.
Un acontecimiento de tal magnitud no podía realizarse sin la presencia del mejor lanzador en la historia de México, el mítico Fernando “el Toro” Valenzuela, quien llegó al improvisado diamante cobijado por una gran ovación por parte de los asistentes.
En algo que parecía cuestión de tiempo, el beisbolista de los Diablos Rojos del México Japhet Amador fue el encargado de romper un cristal de una ventana en los edificios aledaños, ante la mirada atónita de la gente del jardín izquierdo.
A los pies de la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México, dos pelotas golpearon en el asta bandera, una a manos del venezolano Frank Díaz, quien buscó romper el diamante por todo el central, mientras que el ganador del evento, Jorge Cantú vio cómo su bola se estrelló cuando intentó el mismo logro.
El punto máximo llegó en el duelo final entre los peloteros Cantú y Díaz, que puso al público al filo de sus asientos, pues se trató de un duelo entre dos verdaderos titanes del béisbol, mientras que la emoción contenida por los nervios salió a flote cuando el “bronco” dio el batazo para llevarse la victoria.
Redacción