
Una de las ventajas del dispositivo es que puede programarse según las necesidades del paciente
El Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (CINESTAV) del Instituto Politécnico Nacional desarrolla una cama robótica asistencial, la cual se podrá acomodar en 12 posiciones diferentes y que está orientada para atender las necesidades de los hospitales en el sector de la salud, y a la cual le han llamado Camabot.
Mariano Gamboa Zúñiga y Eduardo Vázquez Santacruz encabezaron la aplicación de encuestas a gran parte del personal del Hospital Juárez de México, y gracias a estas se pudieron reconocer las problemáticas urgentes a resolver.
“Encontramos que la cama robótica asistencial era la que mayor impacto tenía, ahí fue cuando decidimos hacer este proyecto, porque cumplía todos los puntos que nos trazamos institucionalmente”, señaló Gamboa Zúñiga.
Uno de los problemas recurrentes en la forma de operar de un hospital son las complicaciones de los pacientes, derivadas de su falta de movilidad, y las camas de los hospitales no tienen movimientos particulares de acuerdo con las necesidades de cada paciente, mencionó Gamboa Zúñiga.
Con base en esto, se desarrolló la “Camabot”, misma que funciona como un sensor gigante, ya que el colchón cuenta con un malla sensora, esta detecta en qué posición está el paciente y esto se refleja en una pantalla táctil que tiene integrada y la cama puede adaptarse para sentar a la persona con un movimiento en la pantalla y con un solo movimiento.
La cama puede ponerse en posiciones adecuadas para que los médicos y enfermeras realicen su trabajo sin poner afectar al paciente, “estas doce posiciones son muy versátiles”, explicó el doctor Gamboa Zúñiga.
Una de las ventajas del dispositivo es que puede programarse según las necesidades del paciente en el transcurso del día, a modo de rutina, y se puede programar una secuencia de posiciones, por lo que no es necesario realizar un esfuerzo de más.
En este proyecto participan más de 70 especialistas de muy diferentes perfiles.
El especialista espera que en tres meses ya tengan las pruebas completas para hacer las adecuaciones necesarias y presentar el modelo final.
Redacción




