
Se presume que Khaw cometió el crimen para ser libre, ya que su esposa no quería darle el divorcio, en Hong Kong
Tres años después, inició el juicio contra un médico anestesista de Hong Kong por haber asesinado a su esposa e hija.
Khaw Kim-sun, encerró a su mujer e hija de 16 años en su automóvil, donde dejó una pelota inflada con monóxido de carbono, gas que les provocó la muerte, de acuerdo con la Alta Corte de la ciudad.

Al principio, el hombre de 53 años indicó que la pelota hallada en la escena del crimen sí era de él, pero que la utilizaría para deshacerse de una plaga de ratas en su casa. Posteriormente admitió el crimen, asegurando que “no estaba en sus planes” terminar con la vida de su hija.
Se presume que Khaw cometió el crimen para ser libre, ya que su esposa no quería darle el divorcio, y era bien sabido que sostenía una relación con una alumna de la Universidad China de Hong Kong, donde laboraba.
Con información de AFP