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Un recuerdo a la chingada de Paz
Foto de Internet

Una de las palabras más mexicanas que existen es “chingar”. Dejando atrás el hecho de que se trata de una palabra altisonante, es uno de lo vocablos más utilizados en el país debido a que tiene diferentes significados, lo cual permite emplearla en un gran número de contextos (en resumen: sirve para un chingo de cosas). 

Pero, en toda la historia, nadie ha hecho un análisis tan profundo del origen de “la chingada” como el que inmortalizó el escritor mexicano ganador del Premio Nobel de Literatura (o sea, era un escritor chingón), Octavio Paz, en su obra “El Laberinto de la Soledad”.

Con motivo de que este 19 de abril se cumplen 20 años de su muerte, ocurrida en su casa de Coyoacán (lugar que hoy ocupa la Fonoteca Nacional de México), aquí recordamos algunos fragmentos de su explicación sobre la estrecha relación de los mexicanos con la “chingada”.

Un recuerdo a la chingada de Paz - magna_exposicin_de_octavio_paz_1
Foto nuestro.mx

Identidad Nacional

No se puede explicar a México sin la “chingada”. En el apartado “Los Hijos de la Malinche”, Paz plasmó que “chingar” es un símbolo que diferencia y hasta da identidad a los mexicanos que la usan.

“Conocerla, usarla, arrojándola al aire como un juguete vistoso o haciéndola vibrar como un arma afilada, es una manera de afirmar nuestra mexicanidad”, apuntaba el también ganador del Premio Cervantes de España.

En esas página, Paz también recordaba que “chingar” podría provenir del náhuatl “xinachtli”, que significa “semilla de hortaliza”, o de “xinaxtli”, que es “aguamiel fermentado”. Asimismo, enumera que esta palabra, aunque con diferente significado, se usa en otros países, como España, Guatemala, El Salvador, Chile, Perú, Ecuador, Argentina, Colombia y Ecuador.

“En casi todas partes chingarse es salir burlado, fracasar. Chingar, asimismo, se emplea en algunas partes de Sudamérica como sinónimo de molestar, zaherir, burlar”, apuntaba quien fuera embajador de México en India durante seis años y que dejó el puesto después de los hechos de 1968.

Un recuerdo a la chingada de Paz - la-chingada1
Foto de Internet

La ‘chingada’ madre

Pero en México, el origen de “chingar” se encuentra en un símbolo de la cultura nacional: la madre.

“¿Quién es la Chingada? Ante todo, es la Madre. No una Madre de carne y hueso, sino una figura mítica. La Chingada es una de las representaciones mexicanas de la Maternidad, como la Llorona o la “sufrida madre mexicana” que festejamos el diez de mayo”, explicaba.

“La Chingada es la Madre abierta, violada o burlada por la fuerza. El “hijo de la Chingada” es el engendro de la violación, del rapto o de la burla”.

Asimismo, el poeta hace un paralelismo entre la Conquista y el acto de ser chingado, lo cual define, de acuerdo con su visión, gran parte de la personalidad de los mexicanos.

Y sí, a los mexicanos les gusta chingar

Pero para Octavio Paz, el hecho de “chingar” –no sólo la palabra– es parte de la vida diaria de los mexicano, además de que califica sus relaciones con el resto de las personas.

“Para el mexicano la vida es una posibilidad de chingar o de ser chingado. Es decir, de humillar, castigar y ofender”, opinaba.

Así que, en estos tiempos, es bueno revisar a Octavio Paz y entender si en México nos va chingón o, como parece ser, nos va de la chingada.

Por Carlos Tomasini (@carlostomasini,)