
Tras su comentada renuncia como obispo y huida de la ciudad de Orán, en Argentina, Zanchetta fue designado asesor del ASPA
Gustavo Zanchetta, quien aduciendo molestias de salud desconocidas renunció hace cuatro meses a su cargo como obispo de la localidad argentina de Orán, fue nombrado por el papa Francisco como nuevo asesor de la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica, una entidad que maneja más de cinco mil propiedades del Vaticano, valuadas en 3 mil 200 millones de dólares.
El ascenso meteórico del obispo emérito en la estructura de la iglesia, así como su sorpresiva renuncia levantaron suspicacias dentro y fuera del Vaticano. Ordenado sacerdote en Quilmes en 1991, fue uno de los primeros sacerdotes en ser nombrados obispos por el papa

En julio de 2013, fue designado pastor de Orán, una localidad con varios problemas importantes, incluyendo el narcotráfico y otros desafíos, siendo ascendido a obispo de la localidad el 19 de agosto de 2014.
Sin embargo, a finales de julio de este año, Zanchetta abandonó intempestivamente su diócesis, sin despedirse de nadie, ni feligreses ni sacerdotes. Posteriormente, escribió una carta en la cual narró que un problema de salud le impedía llevar a cabo su ministerio.
Tras esto, se descubrió que el obispo había viajado casi 900 kilómetros hacia la Arquidiócesis de Corrientes mientras el papa aceptaba su renuncia y finalmente viajó a España, donde aparentaba estar en perfecto estado.
Sobre su renuncia, los medios hablaron de presuntos desmanejos financieros, depresión y problemas con el narcotráfico, mismas que no han sido confirmadas o desmentidas por las autoridades.
El puesto de asesor del ASPA es de reciente creación y pareciera haber sido diseñado especialmente para Zanchetta, por lo que se desconoce cuales serán sus funciones en dicho cargo, o si se mudará a Roma para desempeñarlo, si bien recientemente se le vio en la Casa del Papa, en la residencia de Santa Marta.
Con información de Vatican Insider