
Las autoridades del país esperan que el nivel del agua baje al no esperarse lluvias fuertes para los próximos días
La persistente crecida del río Uruguay, que ya lleva más de dos semanas fuera de su cauce, obligó a 6,885 personas a abandonar sus hogares en ciudades del norte de Uruguay ubicadas a orillas de ese curso de agua.

La más afectada es la ciudad de Salto, casi 500 kilómetros al norte de Montevideo, donde 3,491 habitantes han tenido que dejar sus viviendas como consecuencia del avance de las aguas. Hasta el momento, las lluvias han dejado tres personas muertas.

Otras ciudades afectadas son Paysandú y Bella Unión. Cifras menores de evacuados se registraron en las localidades de San Javier y Fray Bentos, todas a la vera del río Uruguay. El volumen del agua en el río superó el de las peores inundaciones en la historia del país, ocurridas en 1959.

Una semana atrás la cantidad de evacuados era poco más de 4 mil personas.

Un comunicado del Sistema Nacional de Emergencias dijo el viernes que “la situación está bajo control”, que el río ha experimentado un descenso en su caudal y que no están previstas fuertes lluvias para los próximos días.

En Montevideo y otras ciudades del país hay campañas para colaborar con las familias afectadas.
Redacción