Las detenidas están acusadas de rociar un agente neurotóxico en la cara de Kim Jong-nam y podrían recibir la pena de muerte
Una mujer sospechosa de la muerte por envenenamiento del medio hermano del líder norcoreano Kim Jong-un, escribió a sus padres desde la cárcel, pidiéndoles que oraran por ella, pero diciendo “no piensen demasiado en mí”.
Siti Aisyah, una madre de Indonesia que trabajó en Malasia, compareció en la corte el martes junto con una segunda sospechosa, Doan Thi Huong, de Vietnam.
Ambas están acusadas de haber rociado la cara de Kim Jong-nam con un agente neurotóxico, el VX, una versión del gas sarín, provocando su muerte. Por tanto, se les podría aplicar la pena de muerte.
En la audiencia, los abogados de las dos mujeres denunciaron que no pudieron acceder al conjunto del expediente.
Su juicio fue formalmente transferido a la Corte Suprema ya que el tribunal de primera instancia no tenía jurisdicción sobre el caso de homicidio.
El juez del tribunal anunció este martes que el Alto Tribunal de Malasia fijará la fecha del inicio del juicio.
Siti y Houng son las únicas personas que han sido detenidas en el asesinato de Kim Jong Nam en el aeropuerto de Kuala Lumpur el 13 de febrero.
Las mujeres han dicho que fueron engañadas pensando que estaban jugando una broma inofensiva para un espectáculo de cámara oculta.
Yusron Ambary, consejera de la Embajada de Indonesia, informó que Siti escribió una carta a sus padres recientemente, pidiéndoles que no se preocuparan por ella.
“Yo estoy en buena salud, sólo rezo, no piense demasiado en mí, mantenganse saludables y oren por la noche Tengo mucha gente ayudándome Los funcionarios de la embajada siempre vienen a verme”
“No se preocupen, rueguen por mí para que el caso termine pronto y yo pueda regresar a casa, envía mi amor a mi hijo Rio “, indica la carta que fue leída por la diplomática a los periodistas fuera de la sala del tribunal.
El tribunal también fue informado de que el abogado Jagjit Singh fue nombrado por la Embajada de Corea del Norte para supervisa el caso. Singh dijo a reporteros más tarde que fue contratado para “proteger el interés” del gobierno norcoreano. Él no elaboró.
La policía reportó que cuatro sospechosos norcoreanos huyeron de Malasia el día del ataque. Los abogados defensores temen que las mujeres sean chivos expiatorios y las personas que se cree tienen conocimiento del caso abandonaron el país.
El abogado de Siti, Gooi Soon Seng, se quejó ante el tribunal de que los fiscales y la policía no les proporcionaron la evidencia, incluyendo las filmaciones de la cámaras de circuito cerrado (CCTV) del aeropuerto a pesar de repetidas peticiones.
El fiscal general adjunto Muhammad Iskandar Ahmad declaró que la defensa recibirá todo el expediente durante el juicio.
Iskandar dijo que la fecha para la primera comparecencia de ambas en el Tribunal Superior podría ser dentro de un mes, como ocurre en estas situaciones casos de manera habitual.
Las acusadas podrían entonces solicitar un acuerdo con la fiscalía para recibir condenas menores y el juicio comenzaría 90 días después, según Iskandar.
Aunque Malasia nunca acusó directamente a Corea del Norte de llevar a cabo el ataque, la especulación apunta a que Pyongyang orquestó un golpe contra un miembro exiliado desde hace tiempo de su élite gobernante.
Aunque Kim Jong-nam, que estaba alejado de su familia, no era una amenaza política, podría haber sido visto como un rival potencial en el futuro dinástico del país.
Corea del Norte nunca ha reconocido que la víctima era un miembro de la familia gobernante.
Redacción
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