
De acuerdo con el fiscal de Durango, los policías que detuvieron a Bailey lo hicieron sin tener los documentos necesarios para ello
Luego de que se diera a conocer la fuga de Eduardo Bailey, exdirigente del PRI en Nuevo León, de un hospital en Durango, el fiscal de dicho estado dio a conocer que la detención se había dado de manera ilegal, pues en el momento en que se dio no había una orden de aprehensión en su contra.

En entrevista para Multimedios, Ramón Guzmán Benavente, fiscal general de Durango, mencionó que ya iniciaron las investigaciones pertinentes sobre el caso, ante una posible negligencia por parte de los elementos de la Policía Investigadora y de otras 10 personas que participaron en la detención a Eduardo Bailey, quien funge como delegado de la SCT en la entidad.
“Iniciamos una investigación profunda al interior de la Fiscalía y encontramos que los agentes estatales incurrieron en algunas omisiones al hacer la detención de la persona en mención, toda vez que al momento de hacer esto se encontraba en trámite la autorización de la colaboración que venía procedente de la Procuraduría de Nuevo León, y que tenía que materializarse en Durango”, dijo Guzmán Benavente.

Añadió que la detención se realizó sin que se hubiera agotado el trámite correspondiente, por lo que “los abogados del detenido se presentan en el hospital La Paz, y requieren a los agentes aprehensores que les acrediten la legal detención y les muestren el oficio respectivo que los autoriza para realizar la detención, no les muestran nada, tuvieron que liberarlo en ese momento”, señaló.
El fiscal informó que debido a que se violó el debido proceso durante su detención, Bailey, quien fue titular del Isssteleón, podría ampararse para evitar una nueva detención. Asimismo, ofreció su cooperación a las autoridades de Nuevo León para resolver el caso de la mejor manera.
Con información de Milenio