
Norma Catalina presentaba un raro tumor que había alcanzado el 20 por ciento del cerebro afectandole varias funciones del cuerpo
El Instituto de Seguridad y Salubridad Social para los Trabajadores del Estado compartió la historia de Norma Catalina, una mujer de 41 años a la que le extirparon un tumor del tamaño de una pelota de golf, que se encontraba afectando varias áreas nerviosas del cerebro.

La paciente, de nombre Norma Catalina, fue hospitalizada el 29 de abril debido a síntomas de dolor de cabeza incapacitante, vértigo, pérdida de equilibrio, visión doble, perdida del oído, paralisis facial e incapacidad para deglutir y hablar.
Fue entonces cuando los médicos descubrieron el tumor cerebral que invadía el 20 por ciento del cerebro, en un tumor atípico del cual solo se conocen 30 casos a nivel mundial, del cual es el primer caso en México.
“Se trata de un tumor Schwanoma atípico, raro y de muy escasa frecuencia, el primero de este tipo documentado en México y atendido en el ISSSTE” informó el neurocirujano Castillo Rangel.
Por ello se reunió un equipo de 11 doctores a cargo del doctor Carlos Castillo Rangel, utilizaron una nueva técnica conocida como aspirador ultrasonico, el cual pulveriza el tumor en lugar de extraerlo.
La complicada expansión del tumor obligó a la realización de dos cirugías: la primera el 13 de mayo de 2016 y una semana después, el 20 de mayo, se llevó a cabo la segunda.
El doctor señaló que lo impactante del caso fue el número de zonas comprometidas por el tumor, pues implicó los nervios trigénimo, facial, vestibuloclear, glosofaríngeo, vago, hipogloso y espinal.
Por ello lo impactante del caso, pues un error podría haberle costado la vida a la víctima.

“El tumor iba desde arriba hasta abajo involucrando todos los nervios craneales, metiéndose al cerebelo y tallo cerebral, son estructuras vitales que un error en esa región trabajada con tecnología inadecuada y nno teniendo los cuidados necesarios llevaría consecuencias fatales”.
Por su parte Norma agradeció el trabajo de los doctores y enfermeras, cuyos cuidados le brindaron las ganas de salir adelante.
“Doy gracias de que estoy aquí porque mi vida era un tormento. Después de la operación estoy muy bien, con ganas de vivir, de mostrarle a mis hijos todo lo que no les demostré antes.
Pese al éxito de la operación, el ISSSTE manifestó que se mantendrá vigilante de la evolución de Norma Catalina Guajirro, pues los tumores de tipo Schwannoma pueden reincidir en su crecimiento y su familia presenta antecedentes de tumores cerebrales malignos.
Redacción