
Hacinamiento, largas filas para conseguir comida y luchar para cuidar a sus bebés son parte de los desafíos que deben superar las menores
Un centro de corrección para mujeres en Irán representa el infierno para decenas de menores delincuentes que viven en deplorables condiciones en Irán.
Hacinamiento, largas filas para recibir un plato de comida y encarnizadas peleas para poder cuidar a sus bebés recién nacidos (las internas pueden mantener a sus recién nacidos con ellos hasta que cumplan dos años de edad) son solo algunos de los desafíos que deben superar para salir en libertad.
Imágenes difundidas por el medio inglés DailyMail retrata los sombríos rostros de algunas jóvenes, que incluso tienen 9 años de edad, pagan condenas por delitos como asesinato, tráfico de drogas y robo a mano armada.
Las chicas son internadas en el centro tras recibir sentencia y gran número de ellas son asesinadas al llegar a los 18 años.
Cabe señalar que en Irán las mujeres jóvenes pueden ser ahorcadas como sanción a los castigos que cometen. Sin embargo, la gran mayoría de las sentencias se originan tras juicios injustos, incluidos en los basados en confesiones forzadas obtenidas mediante tortura y maltratos.
Irán es uno de los países que ha sufrido un alarmante incremento en la aplicación de la pena de muerte, donde al menos 830 personas fueron ejecutadas entre el 1 de enero y el 30 de noviembre de 2015. Informes también señalan que al menos cuatro de ellos eran menores delincuentes.
Con información de Daily Mail









