Un estudio realizado a padres primerizos, en Alemania, demostró que tener un hijo es más estresante que una muerte o el desempleo.
Aunque la llegada de un hijo siempre es motivo de alegría, también es motivo de preocupación y tristeza, y el impacto del estrés de los padres primerizos es incluso más profundo que ante un evento traumático como la muerte, el desempleo o el divorcio.
Esto quedó asentado en un estudio realizado por el Instituto Max Planck de Investigaciones Demográficas en Rostock, en Alemania, donde los científicos descubrieron que “cuanto mayor sea la pérdida del bienestar, menor es la probabilidad de un segundo bebé”.
Los investigadores indicaron que son los padres con estudios superiores y los que esperan más tiempo en tener hijos los que menos sensación de bienestar sienten al tener un bebé.
Lo cual quedó comprobado con el seguimiento a 2 mil padres primerizos, a quienes se observó desde 2 años antes de tener a su primogénito hasta su nacimiento. Los resultaron arrojaron que 58 por ciento de los padres prefirieron tener un segundo hijo 9 años después del nacimiento del primero.
Esta pérdida de bienestar o felicidad es incluso mayor que cuando se experimenta la muerte de un ser querido o la pérdida de empleo e incluso el divorcio, a causa de las desventajas que implica ser padre, como los gastos, el cambio de rutina, o si alguno de los dos padres se queda en casa cuidando al hijo mientras el otro trabaja.
De acuerdo a Alexa Hart, madre de un bebé de 15 meses, esto forma parte de un “silencio cultural”, ya que con el nacimiento de un bebé se supone que todo mundo debe estar feliz, pero no se toma en cuenta la falta de sueño, agotamiento y frustración de los padres.
A comparación de la muerte que se sabe que es un evento traumático y doloroso para todos los familiares y cercanos al difunto.
Los investigadores alemanes aseguran que este estudio no es para decidir si los padres son felices o infelices, sino más bien conocer las causas de porque las parejas con estudios universitarios consideran con más cautela tener un segundo hijo o no.
Con información de CNN