Elecciones 2024
Elecciones 2024

En un par de años, el paisaje habrá cambiado mucho.

¿Tiene usted buena memoria? Mire bien las gasolineras de ahora. En los próximos meses cambiarán mucho. Veremos estaciones de servicio vestidas con marcas diferentes a Pemex. Llegarán multinacionales como Chevron, Valero, Shell, BP, CEPSA. A partir del 2017 se permitirá la libre importación de gasolinas.

Oxxo será uno de los jugadores que definirá este nuevo territorio gasolinero. Comprará 227 franquicias que ya opera y abrirá 50 más. Entrará en un mercado que tiene ventas superiores a los 700 mil millones de pesos anuales, en aproximadamente 10 mil,900 estaciones de servicio.

En el mapa actual, 8 mil gasolineras pertenecen a empresarios que tienen una o dos estaciones de servicio. Un poco más de 2 mil 500 corresponden a grandes grupos.

En menos de un lustro veremos cambiar de manos a muchas gasolineras. Los empresarios con una o dos estaciones tendrán muchos motivos para vender sus negocios a grandes grupos. En el corto plazo, podrán obtener buen dinero. El que no venda, se verá obligado a competir en condiciones inéditas en nuestro país. Ahora tienen un margen garantizado de 6 por ciento. Esto se acabará, el margen será variable, en un mercado que tendrá precios diferenciados y diferentes calidades de combustibles.

Oxxo Gas dará mucho de que hablar. La división comercial del grupo regiomontano FEMSA tiene la mayor red de tiendas de conveniencia y un músculo financiero que le permite alimentar grandes ambiciones. Sus planes empiezan con el desarrollo de una red de gasolineras que harán sinergia con sus locales. La compra de combustible se lleva bien con la entrada o salida de una tienda de conveniencia.

No es el primer intento de los regios de entrar a este negocio, FEMSA tuvo una colaboración antes del 2005 con la petrolera AMOCO en la que ellos podían ser dueños de la gasolinera y los extranjeros de la tienda, porque en este negocio no podían entrar. Estaba reservado a mexicanos.

Operar 250 o 300 gasolineras lo convertirá en uno de los principales distribuidores de gasolinas en México. Para casi todos, esto sería suficiente. No para el corporativo que preside José Antonio Fernández. No se sorprendan si en los próximos meses anuncia su entrada en el negocio de almacenamiento y distribución en los estados del norte del país.

FEMSA tiene en su radar la posibilidad de importar el combustible desde los mercados más baratos del mundo: Texas y Louisiana. Esto le permitiría traerlo al país a un costo mínimo en un mercado abierto y venderlo a terceros. Una vez que este negocio opere plenamente, tendría una ventaja comparativa frente a otros grupos. Estaría en casi toda la cadena, sin tener que invertir en refinación, una rama del negocio petrolero donde hay exceso de capacidad instalada y, por tanto, buenas condiciones para un comprador que tenga poder de negociación.

¿Qué hará Pemex en la venta directa al público? ¿Qué harán los otros grandes grupos gasolineras? Será muy interesante observar los siguientes movimientos de corporativos como Hidrosina, de William y Paul Karam; ORSAN, de Carlos Sandoval; LODEMA de Emilio Loret de Mola. Se ha dicho que estos empresarios evalúan la creación de un marca mexicana, diferente a Pemex.

Todo puede pasar. Mire bien las gasolineras de ahora. En un par de años, el paisaje habrá cambiado mucho. Lleve su cámara y tome fotos. No vaya a ser que le llegue una ola de nostalgia.