De acuerdo a PEMEX, el robo de gasolina se ha incrementado en el país durante los últimos años, y al parecer la tendencia va al alza.
Durante los dos primeros años de la actual administración federal se han encontrado más tomas clandestinas para el robo de gasolina que en todo el sexenio pasado, y al parecer la tendencia va al alza.
De acuerdo a PEMEX, se encontraron 2 mil 614 tomas clandestinas en 2013, y 3 mil 348 en 2014, para un total de 5 mil 962. Cifra superior a las 4 mil 865 encontradas durante la administración de Felipe Calderón.
La información proporcionada por PEMEX cifra en 11 mil 872 el número de tomas clandestinas detectadas desde el año 2000 hasta el 2014. Los municipios en donde ha habido más robo de gasolina en los últimos 15 años son: Altamira y Reynosa, en Tamaulipas; Culiacán, Mocorito y Salvador Alvarado, en Sinaloa; Huimanguillo, en Tabasco; Juan Rodríguez Clara y Tierra Blanca, en Veracruz; Zapotlanejo, en Jalisco; y Tecate, Baja California.
En solo 13 estados del país se concentra el 50 por ciento de las tomas que se utilizan para el robo de gasolina: Tamaulipas, Sinaloa, Tabasco, Veracruz, Jalisco, Baja California, Querétaro, Nuevo León, Coahuila, Guanajuato, Sonora, Puebla y Chihuahua.
Según Francisco Fernández Lagos, subdirector de Distribución de PEMEX Refinación, estas ordeñas tienen un costo de casi 19 mil 417 millones de pesos anuales para la empresa.
En este millonario negocio ilegal participan trabajadores de PEMEX, narcotraficantes, y empresarios, y se ha incrementado exponencialmente ante la pasividad del Sindicato de PEMEX y de la propia empresa petrolera, señaló Raúl Benítez Manaut, especialista en temas de seguridad.
“Es un crimen institucional, del Sindicato de PEMEX y de los empresarios que venden la gasolina. Así como los empresarios modifican las válvulas para vender litros con cantidades menores, así compran gasolina robada”, comentó.
Con información de El Universal.